RESPECTO AL 'ACUERDO' CON EL MSP: ¡Los derechos a la educación y la salud no son negociables
FOTO_ Sabio Sapo
La lucha de los internos rotativos, y de los estudiantes de ciencias médicas en general, es la expresión del malestar con la situación de crisis en la educación superior y el sistema de la salud en general.
Saludamos la firmeza demostrada por todos los compañeros para manifestarse en las calles, realizar plantones e ir al paro de actividades con el fin de defender el derecho a una remuneración justa para los internos rotativos y que ha despertado la solidaridad de catedráticos universitarios, profesionales de la salud y el conjunto del pueblo trabajador.
El interés de toda autoridad gubernamental es desactivar todo movimiento de protesta, todo foco de descontento con el fin de evitar que este contagie a otros sectores de la población y se convierta en símbolo de las demandas de nuestro pueblo por una vida mejor.
El Acta de Compromiso hoy suscrita por representantes de los internos rotativos, las facultades de medicina y el Estado no da garantía alguna de respeto a los derechos por los que los estudiantes se han movilizado en estas semanas, además una decisión de esa índole debía haber sido consultada democráticamente en grandes asambleas estudiantiles en hospitales y facultades.
El Acta de Compromiso tibiamente acuerda no aplicar el Acuerdo Ministerial 0345 para la cohorte de mayo 2019, pero deja en el aire su aplicación para los estudiantes de futuras cohortes. Es decir, el Ministerio de Salud NO RETROCEDE en su posición de reducir el estipendio y en su voluntad de aplicar una política de recortes no solo a las remuneraciones de los internos, sino al sistema de salud en general.
La salud y la educación son derechos conseguidos por el pueblo tras décadas de lucha, no son dádivas ni limosnas entregadas por los capitalistas y su Estado. En el Acta de Compromiso se pide a los estudiantes presentar propuestas de financiamiento que incluyen acciones fiscales, algo inadmisible pues insinúa la creación o elevación de impuestos que perjudicarán directamente a los trabajadores de nuestra patria.
Hoy, tras conocer el despilfarro y latrocinio que durante la dictadura del decenio benefició a las grandes empresas nacionales y transnacionales, que se cifra en 300.000 millones de dólares, el gobierno no puede tener el cinismo de exigir que seamos los propios estudiantes quienes “busquemos el financiamiento” cuando grandes recursos se entregan a la burguesía. Se exige buscar “fuentes de financiamiento” en tanto el Estado entrega concesiones mineras que garantizan una rentabilidad de 10.000 millones de dólares a empresas privadas, en tanto el Estado solo obtiene 900 millones. ¿Acaso no está allí el financiamiento que tanto busca el gobierno?
Compañeros, los recursos existen y estos deben dirigirse a proveer de educación y salud para todo el pueblo trabajador.
La organización y lucha de los internos rotativos y de los estudiantes debe ligarse con el movimiento obrero y campesino, pues solo allí encontrará el apoyo y la fuerza que necesita para la consecución de sus objetivos. De cara al Estado capitalista toda lucha aislada siempre termina por caer en la celada del diálogo. El actual gobierno ha soltado la red del diálogo nacional y mientras por un lado muestra la sonrisa bonachona, por el otro lanza toda una serie de medidas antipopulares y que implican un retroceso en los derechos adquiridos por el pueblo en el último siglo.
¡Compañeros! La movilización debe mantenerse, es urgente y necesario realizar asambleas estudiantes para debatir los problemas de la educación y la salud. Los estudiantes deben ir a sindicatos, barrios y comunas para explicar las razones de su lucha y pedir la solidaridad de nuestro pueblo.
Solo la lucha nos dará lo que la ley, los patrones y el Estado nos niegan.
¡Con la fuerza de los trabajadores, romper las leyes de los explotadores!
Organizarse es comenzar a vencer
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