c. César Taipe fértil semilla que con alegría insurge en los combates por la nueva vida

Claro que no somos una pompa fúnebre

Gioconda Belli

Claro que no somos una pompa fúnebre, a pesar de todas las lágrimas tragadas estamos con la alegría de construir lo nuevo y gozamos del día, de la noche y hasta del cansancio y recogemos risa en el viento alto.

Usamos el derecho a la alegría, a encontrar el amor en la tierra lejana y sentirnos dichosos por haber hallado compañero y compartir el pan, el dolor y la cama.

Aunque nacimos para ser felices nos vemos rodeado de tristeza y vainas, de muertes y escondites forzados.

Huyendo como prófugos vemos como nos nacen arrugas en la frente y nos volvemos serios, pero siempre por siempre nos persigue la risa amarrada también a los talones y sabemos tirarnos una buena carcajada y ser felices en la noche más honda y más cerrada

porque estamos construidos de una gran esperanza, de un gran optimismo que nos lleva alcanzados y andamos la victoria colgándonos del cuello, sonando su cencerro cada vez más sonoro y sabemos que nada puede pasar que nos detenga porque somos semillas y habitación de una sonrisa íntima que explotará ya pronto en las caras de todos.

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Falleció nuestro entrañable camarada

César Taipe

En Marcha

Nuestro Partido informa del lamentable fallecimiento del camarada César Taipe, producido el día sábado 19 de septiembre 2020, luego de luchar varios días contra el covid19.

César fue un ser humano con la alegría a flor de piel, no importaba lo difícil de las circunstancias, su sonrisa era la pausa necesaria para continuar con los debates, con las decisiones que había que tomar y con las tareas a cumplir. Con esa alegría asumió desde muy joven su militancia política revolucionaria, con mucho compromiso, en lucha inclaudicable contra las injusticias, planteando siempre la posibilidad y necesidad de terminar con la explotación, la injusticia y la miseria en la que viven los trabajadores y los pueblos. Hombre de muchas batallas, entregado a la revolución por varias décadas.

César Taipe, fue un hombre sencillo, un líder que en la lucha individual y colectiva ha sabido volverse eterno. Abrazó la bandera roja desde muy joven, en las aulas del Colegio Rafael Larrea y en el Colegio Mejía. En aquella época, se integró a la lucha estudiantil en contra de los gobiernos neoliberales y vendepatrias, en defensa de la educación; su primer peldaño de un camino del que solo la muerte lo podía apartar lo dio al ser parte de la Federación de Estudiantes Secundarios del Ecuador FESE.

César fue parte de la semilla que dio inicio a la Juventud Revolucionaria del Ecuador, hace más de 30 años, estuvo entre sus fundadores, nutriendo a la Joven Guardia con su cotidiana alegría de luchar, con las palabras sencillas que hermanan nuestros pueblos. Al hablar de un joven héroe, que cayó abatido por las balas criminales del enemigo, al hablar de Jonás, sería injusto dejar de lado la impronta de nuestro camarada César, quien supo traerlo a nuestras filas y enrumbarlo en sus primeros pasos. Al hablar de la lucha del pueblo, es injusto no mencionar el enorme papel de los combatientes de rostros ocultos que se juegan la vida, en la primera línea, sin esperar reconocimientos. En su camino y en su lucha social, también lideró a los pequeños comerciantes del Centro Comercial Ipiales por mejorar sus condiciones de vida y en procura del sustento diario. Así somos los revolucionarios, los marxistas-leninistas, hombres y mujeres sencillos, que asidos de la ideología y la bandera del proletariado, trabajamos por construir un mañana distinto, nuevo, un mejor porvenir, desde los puestos la revolución exige que ocupemos.

Hoy, nuestro camarada ha partido, y su organización, el PCMLE, se une en el dolor con sus familiares, amigos, camaradas, conscientes de la irreparable pérdida que compartimos. César, que ha caído en medio de la lucha por la vida, vive en nuestra memoria, en nuestros corazones y, sobretodo, en nuestra lucha seguiremos sus pasos y no descansaremos hasta ver realizados sus ideales y sueños, a los que dedicó su vida para conquostarlos, que es el sueño de todos, de los muchos que se han ido, de los que están y de los miles que vendrán a ocupar su espacio en la trinchera y a destruir este sistema y fundar uno nuevo.

¡Hasta siempre camarada César¡

¡Vivirás en nuestros corazones y en nuestra lucha para liberar a los pobres y oprimidos!

https://www.pcmle.org/EM/spip.php?article10767