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“ L A R E B E L I Ó N D E L A S F L O R E S ”,


Foto: Pressenza

“Sin las mujeres, los derechos no son humanos”. Lastimosamente entre los más pobres de nuestro país y de nuestro continente están los pueblos originarios y de entre los pueblos indígenas, la mujeres indígenas. Alegra profundamente ver a mujeres indígenas organizadas alzar su voz en contra de los atropellos a la vida, a los pueblos, a la libertad, a la dignidad, a las mujeres. ¡Qué contradicción! Los pobladores originarios de este continente, después de más de 500 años de sumisión y saqueo siguen siendo los más pobres. ¡Qué pecado colectivo! ¡Qué oídos sordos y qué corazón cerrados que los nuestros!

He aquí el Manifiesto que, recién después de su reunión continental, hizo público el “Movimiento de Mujeres Indígenas por el buen vivir”. ¡Curiosamente en este momento su sitio en internet no está disponible!...

“El calendario impuesto dice que hoy es 12 de Octubre del 2020. A 528 años de la invasión a nuestros territorios y arrebatamiento de la libertad de nuestros pueblos, la tierra es testigo de cómo la historia se repite. Con la llegada del invasor, llegó también nuestra esclavitud, nuestra libertad entonces era tan plena y absoluta que incluso muchos pueblos no tenían palabras para nombrarla, se definía en nuestra relación con la mapu, con la pacha, con los espíritus de la naturaleza, con nuestro andar en reciprocidad.

528 años después nuevamente tenemos que hablar de libertad. Con un encierro impuesto e invasores renovados. Los métodos cambian, guerras de baja intensidad, virus, miedos, medios de comunicación racistas y manipuladores, el propósito es el mismo. La rebelión de las Flores continúa, nosotras mujeres indígenas guardianas de los territorios elevamos la voz de la tierra desde éste Movimiento, estamos juntas.

Hoy nuestra palabra es más urgente que nunca, la palabra profunda. Estamos de pie, somos flores nativas, habitamos en la raíz rebelde, en cada montaña, en cada lago, en cada árbol, estamos sosteniendo la vida.

Decimos basta al Chineo, basta al ¡terricidio!

Demandamos que dejen de quemar los bosques, montes y humedales para sus negocios inmobiliarios!

No a la megaminería. Basta de sus represas y su represión.

No al acuerdo por las megafactorias de cerdos con China, ni en noviembre ni nunca!

Exigimos y caminamos hacia la libre determinación de nuestras cuerpas, de nuestros territorios y de nuestros pueblos.

Exigimos la Liberación inmediata de las fronteras de los estados coloniales para la libre circulación de la medicina ancestral para sanar, defendemos el derecho al buen vivir. La Cordillera No Es Frontera. Por el Retorno de la Machi Mawün a su rewe y todas nuestras autoridades espirituales a sus territorios.

La tierra -la pacha, la mapu, Yvy, Hunhat, Haru- se manifiesta, y es testigo de todo. Sabe quiénes somos, nos está hablando. Si tan sólo escucháramos, como lo hacían nuestros ancestros y ancestras.

La tierra es testigo del amor, de nuestra fuerza y caminar juntas. La tierra es testigo de todo.

En los pueblos originarios, ¡la revolución de la flores continúa!”

“La tierra nos está hablando”, nos dicen estas mujeres. A los cristianos que afirmamos hacer nuestras las opciones de los pobres, a las y los humanistas que luchamos por un Ecuador distinto y mejor, a los hombres y mujeres de buena voluntad que nos ponemos de lado de las víctimas… ¿cuál va a ser nuestra solidaridad con estas mujeres? ¿Cuál va a ser nuestra compasión con la tierra que nos está hablando? ¿Cuál va a ser nuestro compromiso valiente para denunciar tantos atropellos? En estos tiempos de elecciones, ¿sabremos desenmascarar a los candidatos que más atropellen a los pueblos originarios y a sus mujeres? Dijo Jesús como criterio definitivo en el juicio final: “¡Lo que has hecho a favor de estos más pequeños, a mí lo has hecho! ¡Y lo que has hecho en contra de ellos, también en contra de mí lo has hecho!”

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